La Cofradía comienza con la Santísima Cruz - Cruz de Guía -, que es escoltada por cuatro faroles.
Le siguen parejas de nazarenos que portando, en el cuadril, cirios de cera roja, color Sacramental, conforman los tramos que preceden a Nuestro Padre Jesús Cautivo, el primero de los cuales se cierra con el Guión Sacramental y que, como el resto de las insignias, es escoltado por cuatro varas.
El segundo tramo finaliza con el Senatus, con la Bandera Carmelitana concluye el tercero y el cuarto con el Estandarte
El cortejo que precede al Redentor Cautivo se cierra con la Presidencia que es antecedida por dos nazarenos con Bocinas.
Inmediatamente después figura el acompañamiento litúrgico, compuesto por cuatro ciriales y dos incensarios con dalmáticas, dos monaguillos portando, uno de ellos, una naveta y el pertiguero.
El paso va acompañado de cuatro manigueteros y una escolta del Cuerpo de la Guardia Civil. Tras el paso van devotos y devotas y le siguen penitentes que realizan su estación de penitencia portando cruces de penitencia, entre ellas, desde el año 2002, se han intercalado los Estandartes del Santísimo Cristo de Santiago y el de las Benditas Ánimas del Purgatorio, ambos acompañados por dos varas y dos faroles.
Se inician los tramos del paso de Virgen con tres monaguillos portando la Cruz Parroquial y dos ciriales.
Le siguen tramos de nazarenos portando, en el cuadril, cera blanca, color significativo de la Pureza de la Santísima Virgen María.
El primero de ellos lo cierra el Estandarte Sacramental, el segundo finaliza con la Bandera Pontificia, de color amarillo y blanco, la Bandera Concepcionista o de la Inmaculada, de color celeste, cierra el tercero y el cuarto con las Reglas de la Hermandad.
Concluyen los tramos del paso de Nuestra Señora con la Presidencia de la Cofradía que le corresponde al Hermano Mayor, siendo precedida por dos nazarenos portando Bocinas.
El acompañamiento litúrgico del paso de Nuestra Señora de las Lágrimas lo forman cuatro ciriales y dos incensarios con dalmáticas, dos monaguillos portando uno de ellos la naveta y el pertiguero.
El paso va custodiado por cuatro manigueteros y una escolta del Cuerpo de la Guardia Civil.
Inmediatamente tras el paso van devotos y devotas y tras ellos hermanos penitentes y de luz. |